3 consejos para pintar tu casa
No cabe duda de que solo con pensar en realizar algún tipo de renovación u obra en la casa, como es el caso de pintar, a todos se nos ponen los pelos como escarpias.
Sin embargo, se trata de una tarea que es necesario realizar cada cierto tiempo. Por tanto, lo más recomendable es afrontarlo como lo que en realidad es: un proyecto ilusionante.
Lo verdaderamente importante es que focalices tu atención en dos cuestiones básicas: la primera y más importante es organizar todo el proyecto de manera que te resulte una tarea entretenida y gratificante; la segunda es tan sencilla y agradable como imaginar la satisfacción que sentirás con el resultado final.
Para que todo salga a pedir de boca y evitar el estrés que acompaña a ciertas reformas en el hogar, te vamos a dar tres consejos para pintar tu casa. Con la planificación adecuada, todo irá sobre ruedas. Ya lo verás.
1) Planifica
Planificar es básico para que tu proyecto llegue a buen puerto. Comienza por decidir cuál será la época del año más idónea para comenzar a pintar.
A este respecto deberás ser lo más objetiv@ posible y tener en cuenta, además de las condiciones climatológicas, tus responsabilidades laborales y familiares. Las circunstancias personales condicionan cualquier toma de decisión, máxime una con estas características. Por tanto, es importante que analices estos aspectos con detenimiento.
Primero haz una previsión realista del número de días que vas a necesitar para realizar todo el trabajo. Este factor irá en función de diversas variables: las horas efectivas que le podrás dedicar diariamente, la ayuda con que contarás, los metros cuadrados a pintar y el estado de conservación de paredes y techos.
Intenta reservar esos días para dedicarte exclusivamente a pintar tu casa, pues manteniendo varios frentes abiertos solo conseguirás dispersar tu atención y elevar tu nivel de estrés.
2) Mira a tu alrededor
Pintar una casa vacía es muy sencillo. No tienes muebles por medio, ni tejidos que retirar. Si es este tu caso únicamente necesitarás proteger algunos elementos básicos como el suelo, los rodapiés, los marcos de puertas y ventanas, los enchufes, las llaves de la luz…
Sin embargo, la cosa cambia radicalmente si tu casa está amueblada. Mucho más si tienes que continuar haciendo tu vida en ella mientras pintas.
En este caso, para evitar desperfectos en tus pertenencias, necesitarás proteger cuidadosamente todo lo que forzosamente se quede en el interior de la casa. Recubre con especial cuidado los tapizados para evitar que el polvo se incruste en ellos.
Si cuentas con un trastero haz una lista de todas las cosas que puedes trasladar allí.
En otra lista anota el material que necesitarás para proteger todo lo que se quede en la casa (cinta protectora, rollos de papel y/o de plástico para tapar, cajas para embalar, plástico de globos para proteger elementos delicados) y también las herramientas para pintar (rodillos, pinceles, mango telescópico, cubeta, escurridor, espátula, escalera, guantes, etcétera). Comprueba previamente si ya cuentas con algún material en casa.
3) Te vas de compras
Es el momento de ir de compras, sí, pero no sin antes seleccionar el/los color/es base de cada estancia y el tipo de pintura con que cubrirás las paredes de tu casa.
Cuando lo tengas, anota todo en una tercera lista.
La selección del color debería ir en función de tu gusto personal, del tamaño y decoración de cada hueco y, especialmente, de la luminosidad de cada habitación. Para orientarte puedes echar un vistazo a alguna revista de decoración.
Las tendencias actuales quizás te sirvan como referencia. Eso sí, procura no dejarte deslumbrar por los proyectos imposibles que a menudo vemos en este tipo de publicaciones. Sé realista en cuanto a lo que tu casa puede dar se sí. Finalmente, añade a tu lista fotografías de cada estancia. Ahora sí, ya estás preparado para lanzarte a la aventura de comprar todo lo necesario.
Si has seguido nuestros consejos, en breve comprobarás que hacer listas es un hábito muy práctico para organizar cualquier tarea y maximizar el tiempo disponible.
Por otro lado, las listas también son un elemento muy útil en la complicada tarea de ahorrar dinero. Si sales a comprar o a pedir un presupuesto con los deberes bien hechos, serás mucho más preciso en la especificación de tus necesidades.
Las listas serán tu aliado perfecto para evitar que compres artículos de más o que te extralimites en la cantidad del material necesario para pintar tu casa. De este modo podrás gastos superfluos.
Cuando por fin llegue el día, no tendrás de qué preocuparte, pues todo el material estará preparado, el trabajo organizado y te sentirás en condiciones de comenzar la tarea. Manos a la obra.